Leer sobre la “vastedad del norte chileno” o “la inmensidad de desierto de Atacama” es algo bello y necesario. La Región de Antofagasta es rica en historias que merecen ser rescatadas y contadas, porque son parte fundamental de nuestra identidad.
Más allá de sus recursos naturales, este territorio es un crisol de culturas, vivencias y sucesos, desde sus inicios allá desde mediados de 1800 hasta la actualidad. Y en Don Caliche queremos relevar todo eso.
Somos un medio nuevo, recién el 2 de enero cumpliremos dos meses desde que comenzamos a publicar sobre la historia regional.
En este breve tiempo hemos subido a la red 14 artículos sobre diversas temáticas, como anécdotas históricas, relatos sobre la Guerra del Pacífico y también notas sobre íconos regionales como la Basílica Corazón de María de Antofagasta o el Tranque Sloman. Todo gracias a aprovechar la tecnología para difundir fácilmente la historia calichera de nuestra región y de todo el norte chileno.
Este enfoque regional no solo fortalece nuestra identidad, sino también fomenta un sentido de pertenencia con esta zona… Quizás la misma pertenencia que los obreros tenían tras vivir por largos años en las oficinas salitreras. El arraigo a la pampa era/es fuerte.
En estos últimos dos días del año creemos que la existencia de un medio de comunicación con una mirada hacia la historia y patrimonio del Norte Grande en general y pampino en particular, es importante para tener presente nuestras raíces. Apoyar y fomentar los medios que difunden la historia de la Región de Antofagasta es una inversión en la comprensión, apreciación y preservación de la riqueza cultural e histórica que tenemos.
Estamos convencidos que entender el pasado de una manera entretenida nos sirve para comprender el presente y adelantarnos al futuro.
Que sea un gran término de 2023 y un mejor inicio del nuevo año que nos espera, ojalá con más caliche y anécdotas pampinas para todos y todas.
¡Feliz Año Nuevo a todas y todos!
Don Caliche